Las noticias sobre Ozzy Osbourne no paran. Hace unos días nos entristecíamos con la noticia que el Príncipe de las Tinieblas se retiraba de los escenarios, de manera definitiva, por temas de complicaciones en su salud. Sin embargo, hay un haz de luz en medio de esta penumbra: el pasado fin de semana, ‘Patient Number 9’, último trabajo discográfico de Ozzy, fue ganador del Grammy en la categoría de «Mejor álbum de Rock».
Y esa no fue la única estatuilla que ganó Ozzy, ya que también se hizo merecedor del Grammy a la categoría de «Mejor interpretación del metal» por «Degradation Rules». Esta performance contó con la participación del ex–Black Sabbath, Tony Iommi.
Para esta edición del Grammy, Ozzy Osbourne había sido nominado en 4 categorías: Mejor álbum de rock, Mejor canción de rock, Mejor interpretación del metal y Mejor interpretación del rock.
Un trofeo más a la vitrina
No es la primera vez que Ozzy gana la estatuilla. Ya la había recibido anteriormente en 1993 con su canción «I Don´t Want To Change The World» en solitario, y con Black Sabbath con sus canciones «Iron Man» y «God is Dead?».