Dicen que todo cambio va orientado para mejorar o empeorar las cosas y en el ambiente musical este dicho no es ajeno a la realidad. Los fanáticos hemos sido testigos de una serie de cambios que nos han traído desagrados, pero también tinos al lograr una combinación prodigiosa y de buen gusto para nuestros oídos. Uno de estos logros tiene un nombre santificado por así decirlo: SAINT ASONIA.
Como toda combinación, existen elementos fundamentales que la conforman y para Saint Asonia sus elementos sí que son de peso en el género del metal alternativo. En primera, Adam Gontier, cantante de potente voz y que hizo de la banda, conocida por muchos, Three Days Grace uno de los grupos mejor posicionados en el metal alternativo; y en la segunda batuta, Mike Mushok, guitarrista de la respetada banda Staind (de la que ha hecho silencio musical en los últimos 4 años). Completan el equipo Rich Beddoe, ex-baterista de la banda canadienseFinger Eleven, y el bajista Corey Lowery de la banda rock estadounidense Eye Empire.
Como toda banda que recién empieza a “cocinar” sus primeras canciones, empezaron soltando un par de singles a través del visitado YouTube, lo cual conmocionó y trajo intrigas a muchos seguidores de Three Days Grace que escuchaban la peculiar voz de Gontier pero con un nombre de grupo diferente y todos coincidían con la misma pregunta: ¿Qué es Saint Asonia?
Tras el lanzamiento de 2 sencillos de intriga durante el mes de mayo, y tras las declaraciones de Gontier y Mushok en los medios despejando la intriga de la banda “santa”, llegó a fines de julio, y como regalo de fiestas patrias, su primer disco homónimo, compuesto por 10 canciones y lanzado vía RCA Records.
Como arranque de este primer trabajo, nuestros oídos son bien recibidos por la familiar “Better Place”, la cual fue el primer sencillo y en el que refleja todo el poder que trae consigo un debut musical efectivo para quienes quieren rockear. Muchos afirman oír e interpretar en las letras de los primeros temas, el periodo post-Three Days Grace que atravesó Adam Gontier tras su salida. De igual forma siguen “Blow Me Wide Open” y“Let Me Live My Life” (2do y 3er sencillo promocionado respectivamente); “Fairy Tale” y “King of Nothing” son otros de los temas que no dejan mal parado la onda de este grupo. Mientras que en la producción del disco el sonido de cada músico refleja muy bien su experiencia conforme a las bandas a las que pertenecieron. Tal es el caso de la guitarra de Mushok que es fuerte y agradable en los momentos más agresivos del disco, pero también lenta y melódica en las baladas metal como “Even Though I Say”; asimismo Lowery maneja bien el bajo en cada pieza, siendo notorio en las baladas en donde su poder se percibe con gran armonía, además la batería de Beddoe es bien ejecutada tanto en las canciones fuertes, las cuales ameritan tener esa fuerza tal cual lo es la voz de su vocalista.
Para variar, “Waste my Time” y “Trying to Catch Up With The World” son las baladas que hacen de este disco una mezcla variada para quienes quieren rockear, pero también para quienes son de escuchar relajados sobre su cama. Cabe señalar que esta última es una canción en la cual Gontier ya había trabajado años atrás mucho antes de Saint Asonia y que incluso publicó en su cuenta personal de Facebook.
Por último, “Leaving Minnesota”, narra el problema personal de Gontier respecto a su salida de su ex-banda, el divorcio que tuvo y problemas con las drogas, dejando por lección que siempre hay oportunidad de volver, incluso con más fuerza y revitalizados. En pocas palabras, la canción mas íntima del álbum.
En conclusión, Saint Asonia es de los pocos grupos nuevos y buenos que nos ha traído hasta el momento este 2015, formado por elementos “viejos” que ya tienen su tiempo en el ambiente musical y que deleitan a nosotros: los fanáticos de sus ex-bandas (llámense Three Days Grace, Staind, Finger Eleven y Eye Empire) con novedades que, de ley o simple curiosidad, puedes bajar a tu reproductor favorito y así entretener tus oídos.