Han transcurrido cuarenta años desde que Ian Curtis decidiera quitarse la vida. Tras dicho suceso, tanto él como sus canciones junto a Joy Division siguen siendo uno de los enigmas más grandes de la música.
Su hija, Natalie Curtis, tenía solo un año de vida cuando su padre tomó esta fatídica decisión y pese a que muchos son los misterios que hay detrás de la figura de Ian como artista, Natalie, parece siempre haber empatizado con el lado humano de su padre, quien era constantemente golpeado por la epilepsia y sus problemas psicológicos.
Natalie, a la edad de 18 años, recibió un regalo de Bernard Summer, ex guitarrista y tecladista de Joy Division, la mítica guitarra pentagonal que utilizó Ian en el videoclip de “Love Will Tear Us Apart” y que se espera, sea vendida en $100 000 dólares.
La subasta se llevará a cabo el 13 de octubre y será organizada por Bonhams. El instrumento estará acompañado por otra guitarra que era propiedad de George Harrison y que se sabe, fue tocada también por John Lennon. Puedes encontrar más información aquí.
El valor emocional de la guitarra de Curtis
Natalie Curtis en un comunicado dijo «No soy para nada musical, y aun así es fascinante ver la guitarra de mi padre. Quiero decir, es una cosa tan personal. Como soy una persona visual, la Phantom es especialmente interesante para mí, ya que el diseño es muy inusual. Crecí cerca y he trabajado con músicos, y pese a que he visto muchas guitarras, nunca he visto algo como esto».
Finalizó diciendo: «De todo lo que me han contado sobre mi padre, él estaba muy obsesionado con como las cosas lucían, y para mí la Phantom tiene sentido que luzca como una guitarra de Ian Curtis».
El fallecido cantante no solo la utilizaría en el videoclip de “Love Will Tear Us Apart”, sino también en la gira europea que daría con Joy Division en 1980, semanas antes de su deceso.
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