
La música ha perdido a uno de sus titanes más grandes y controvertidos. John Michael "Ozzy" Osbourne, el inconfundible vocalista de Black Sabbath y una leyenda del rock, ha fallecido hoy a los 76 años.
Su partida deja un vacío inmenso en el corazón de millones de fans y en la historia del rock, especialmente después de que el ícono se despidiera de los escenarios hace solo unas semanas con un memorable concierto final.
Ozzy venía librando una dura batalla con problemas de salud, incluyendo un diagnóstico de enfermedad de Parkinson y las secuelas de viejas lesiones. Si bien los detalles exactos de su fallecimiento no han sido revelados aún, las complicaciones derivadas de estas condiciones habrían sido la causa de su deceso. El "Príncipe de las Tinieblas", que dividía su tiempo entre Los Ángeles y su natal Buckinghamshire, Inglaterra, finalmente encontró la paz, justo cuando el eco de su última gran actuación aún resonaba.
Hace apenas unas semanas, el 5 de julio de 2025, Ozzy Osbourne subió al escenario en Villa Park, Birmingham, para el concierto "Back to the Beginning". Este evento, anunciado como su despedida final, fue una noche histórica donde no solo ofreció un set en solitario, actuando desde un trono debido a su condición, sino que también se reunió con sus compañeros originales de Black Sabbath, Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward, por primera vez en 20 años. Fue un éxito rotundo, transmitido globalmente y con la participación de figuras como Metallica y Guns N' Roses, que rindieron tributo al legendario artista.
Ozzy: Más Allá de los Excesos, un Legado Inmortal
La trayectoria de Ozzy Osbourne fue un torbellino de creatividad, escándalos y una influencia musical innegable. Desde sus humildes comienzos en Birmingham hasta convertirse en un fenómeno global, siempre fue él mismo. Aquí, algunos momentos clave que sellaron su leyenda:
- Pionero del Heavy Metal (Década de 1970): Como la voz principal de Black Sabbath, Ozzy no solo cantó, sino que ayudó a forjar las bases de un género completamente nuevo. Álbumes seminales como "Paranoid", "Master of Reality" y el homónimo "Black Sabbath" no son solo discos; son la esencia misma del heavy metal. Su inconfundible voz lúgubre y su impredecible presencia escénica fueron la chispa que encendió la llama del metal oscuro y pesado.
- Un Resurgir Triunfal en Solitario (Década de 1980): Tras su salida de Black Sabbath, muchos lo dieron por acabado. Sin embargo, Ozzy resurgió con una fuerza arrolladora, impulsado por la magia del fallecido guitarrista Randy Rhoads. Con joyas como "Blizzard of Ozz" y "Diary of a Madman", nos regaló clásicos instantáneos como "Crazy Train" y "Mr. Crowley", demostrando que era una estrella capaz de brillar con luz propia, más allá de su banda original.
- El Showman Inigualable y la Controversia Constante: Ozzy y la controversia eran sinónimos. Desde el notorio incidente del murciélago en el escenario hasta sus múltiples encuentros con la ley, su comportamiento errático lo mantuvo constantemente en los titulares. Pero detrás de todo el alboroto, residía un showman nato con una conexión auténtica e inquebrantable con su audiencia, capaz de cautivar y escandalizar a partes iguales.
- Ozzfest: Un Festival Icónico (Mediados de los 90 en adelante): Con la visión y el apoyo de su esposa y mánager, Sharon Osbourne, Ozzy lanzó Ozzfest, un festival que se convirtió en un pilar para el heavy metal y el hard rock a nivel mundial. No solo revitalizó su propia carrera de manera espectacular, sino que proporcionó una plataforma crucial para incontables bandas nuevas, reafirmando su rol central en la escena musical y en la formación de nuevas generaciones de talentos.
- El Ícono del Reality Show (Década de 2000): La vida de la familia Osbourne se abrió al mundo con el exitoso reality show de MTV, "The Osbournes". De repente, la audiencia pudo ver a Ozzy no solo como la "bestia" del escenario, sino como un esposo y padre: excéntrico, sí, pero profundamente entrañable y divertido. Este inesperado giro lo conectó con una nueva legión de fans que lo conocieron más allá de su faceta musical.
La partida de Ozzy Osbourne deja un vacío irremplazable en el universo del rock. Fue mucho más que un músico; fue un fenómeno cultural, un sobreviviente y un visionario que desafió todas las convenciones. Su legado, tanto con Black Sabbath como en su exitosa carrera en solitario, vivirá para siempre, y su espíritu indomable resonará en cada riff de guitarra.
Descansa en paz, Ozzy. El mundo del rock te echará de menos, pero tu música es eterna.