En mayo del 2018, Gibson se declaró en bancarrota debido a las bajas ventas de sus guitarras en los últimos años. Desde entonces la empresa ha puesto en marcha un plan para superar dichos problemas. Una de las medidas, por ejemplo, es olvidar y deshacerse de todo aquello causante de este declive: las gestiones, los trabajadores y hasta las guitarras.
Un ex empleado de la empresa mediante su usuario BJ Wilkes subió un vídeo a Youtube donde se ve como un vehículo pesado destroza varios ejemplares del modelo Firebird X.
El usuario explica que ese modelo ha tenido bajas ventas y por ende los accionista que han salvado momentáneamente de la quiebra total a Gibson han decidido tomar esta acción que le ha roto el corazón a varios amantes de la música no solo por el valor monetario que tienen las guitarras de esta compañía, si no por el valor sentimental y musical que se ha forjado por años.