La industria de la distribución musical a cambiado a lo largo de los años y de una manera un tanto acelerada. De pasar de los vinilos al disco compacto, el cassette, el formato mp3 y ahora la era del llamado streaming, la humanidad no ha dejado de consumir música, sea cuál sea la manera.
Pero, así como no se ha detenido la forma de consumir música, tampoco se han detenido los diversos métodos para «piratearla». Formatos antes mencionados como el disco compacto y el cassette hicieron del pirateo algo sencillo pues proporcionaban al comprador del disco original o el formato original, la facilidad de sacar cuantas copias quisiera, mediante el uso de ciertos aparatos, del disco o cassette comprado. El único problema con esta copia del disco o cassete original era que, al ser un formato físico, no poseía las características del original, siendo la música grabada en él lo único «igual» entre el original y la copia. Este problema desapareció con la llegada de formatos digitales en los cuales la distinción entre el formato original y la copia era casi imposible.
Esto a la larga, ha generado muchas pérdidas para las disqueras y artistas pues al encontrar copias de las canciones originales en internet totalmente gratuitas, los usuarios, sobretodo los de países con una legislación pauperríma en cuanto a protección de los derechos de autor y piratería en internet y dificultades de acceso al material, optan por el camino de la piratería antes de comprar la música original.
En consecuencia a esta problemática algunos creen haber encontrado la solución en el llamado «NFT» (Token No Fungible en sus siglas en español) el cual ha sido utilizado por bandas como Kings Of Leon para distribuir su último disco en internet. Entonces ¿Qué es NFT en esencia? ¿Cómo funciona? ¿De verdad logra combatir la piratería? Todas estas preguntas serán respondidas a continuación.
¿Cómo funciona el NFT?
El NFT es más que solo un archivo, es un «código único» (hash) soldado al código fuente de un archivo digital. Cualquier mínima modificación en el archivo cambiaría el hash radicalmente por lo que con este sistema garantiza que el archivo es original y «único».
Los NFT tienen una naturaleza similar a la del bitcoin, las populares «criptomonedas». Para ponerlo de forma sencilla, las monedas digitales funcionan con un número de serie que identifica las transacciones y un sistema llamado blockchain que permite conocer de donde viene el bitcoin y todas «las manos» (o propietarios) por donde ha pasado, por decirlo de alguna forma.
Los NFT funcionan con esa misma idea. Los «tokens» (archivos) se almacenan en billeteras virtuales y usan el registro blockchain para validar la autenticidad de los archivos.
¿Qué es blockchain?
Imagina un gran libro contable imposible de falsificar. Es básicamente eso. Su funcionamiento es algo más complejo, pero en esencia es un registro de bloques de código (conectados entre sí de la misma manera en que los hash están conectados a los archivos en los NFT) que asegura que los tokens en su interior son completamente válidos a través de una serie de operaciones en miles de computadoras independientes (mineros) alrededor del mundo que se aseguran de que todo sea correcto. El gran volumen de validaciones garantiza su confiabilidad.
¿Por qué los NFT valen tanto?
Los NFT no valen nada por sí mismos. Solo garantizan originalidad. Es el contenido el que puede o no, tener valor, y este está sujeto a lo que la gente está dispuesta a pagar por ella. Su principal mercado, es el coleccionismo.
El CEO de Twitter vendió su primer tuit como un NFT por $ 2,9 millones. El tuit sigue en la plataforma y cualquiera lo puede ver, pero ese «momento virtual» tiene ese precio.
Si pensamos en algo que se pueda «poseer», hablemos de tarjetas de basketball. Virtuales, claro. Un inversor compró tarjetas de la NBA por 175 mil dólares y ahora valen 2 millones. Probablemente muchos de nosotros no tengamos interés en ellas, pero hay quienes sí, y si las quieres (las originales), eso es lo que hay que pagar.
Los NFT empezaron siendo una manera de intercambiar tarjetas de gatitos casi sin valor. Algunos de ellos hoy valen cientos de dólares. Como en el arte moderno, el precio en los NFT no siempre parece tener sentido. Y es que suelen valer más por lo que representan que por lo que son.
Como ves, dependiendo de qué, podrían ser una gran inversión a futuro, o simplemente una pésima idea. El tiempo lo dirá.
¿Cómo se usa NFT en la música digital?
En la música digital, al archivo o canción original se le asigna un número de serie y se transfieren a usando blockchain. Esto permite conocer la trazabilidad del archivo musical. De esta forma esta tecnología certifica que el archivo que posee ese seriado es el archivo original y no una copia, imitación o falsificación.
Pero hay un problema…
Esto no funciona de manera igual en la música que en el arte gráfico (pinturas digitales, ilustraciones), pues en este último tipo de arte el objetivo del artista o ilustrador (o dueño de la obra) es vender único archivo original de gran valor. Imagina una subasta de arte en un museo. La misma idea. Todos pujando altas sumas de dinero por obras únicas e irremplazables.
Por otro lado, la música (la que se comparte al público) esta pensada para vender miles y miles de copias, no netamente el archivo original, o sea el archivo «base». He aquí el problema con el NFT y la música digital.
Finalmente, la pregunta principal:
¿NFT combate la piratería en realidad?
La respuesta es un contundente no. La respuesta es sencilla. Los NFT no impiden que se realicen copias de un archivo original, algo que pasa naturalmente en la industria de la música digital donde el principal objetivo es la masificación, las copias por montones.
Lo único que hace el NFT es certificar cuál es el original y cuál no, lo cual le da un valor especial a ese archivo original por sobre los demás, sin embargo la música sigue siendo la misma. No se dejarán de hacer copias porque una obra sea NFT o no. Por lo que este no es el camino. ¿Eliminarías tu biblioteca de música por que no son NFT para conseguir originales con sobreprecio?
Donde los NFT sí pueden tener utilidad y mayor injerencia es al interior de la industria musical. Con este protocolo garantizando la originalidad de los masters de grabación, samples, librerías de audio y efectos, bases, etc. Archivos que de no garantizar su originalidad sí podrían estar sujetas a demandas económicas.