A principios de los 2000, sin Internet al alcance de la mano y durante los últimos años de la era dorada de MTV, hubo un crossover que podría haberle hecho batalla a Avengers Endgame. La unión de Adam Sandler, (por eso años, una megaestrella de Hollywood), con Deftones e Incubus para interpretar una versión acústica de «Be Quiet and Drive».
¿Por qué? Todo era parte de una estrategia promocional para la recién estrenada película de Sandler: Little Nicky. En ella, el actor interpretaba al «hijo bueno del Diablo», quien tenía que enfrentarse a sus dos hermanos malvados para salvar el mundo y convertirse en el sucesor de Satán.
La popularidad de la cinta es discutible, pero la nostalgia llevó a Little Nicky a envejecer bien y ser recordada mejor de lo que fue. Puede parecer una comedia sin mayores pretenciones, sin embargo, hay quienes le han atribuido mayor valor con análisis «más profundos». ¡Era una premonición de la llegada de la cultura millennial!
Volviendo a la música, una de las cosas que más llamaon la atención en la película fue que en medio de la instaurada popularidad del nü metal de aquellos años, Little Nicky aprovechó para incluir en su banda sonora a diversas agrupaciones como: Linkin Park, Muse, Deftones, Incubus, Disturbed, Van Halen, Cypress Hill, AC/DC, Foo Fighters e Incubus.
De hecho, como dato curioso, en un momento juegan con el enfrentamiento entre los conservadores fans del heavy metal clásico y la «blasfemia» que significaba la llegada del nü metal.
Little Nicky nos dejó curiosos momentos como la participación de Tarantino (a quien no trataron muy bien), Ozzy Osbourne y otros artistas. Además, de la razón de esta nota y de la que ya nos estábamos olvidando: esta versión de «Be Quiet and Drive» que resultó ser bastante interesante:
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